A menudo me solicitaron escribir oraciones que pudieran utilizarse para el rezo personal. Pues bien, he formulado para cada di¿a de la semana una oraciön matutina y una vespertina. Trate¿ de colocarme en la situaciön del orante. Yo mismo rezo por la man¿ana y por la noche en silencio. A la man¿ana lo hago con la actitud ti¿pica del orante, con los brazos extendidos para abrir el cielo sobre los hombres. Y a la noche ofrezco mi di¿a a Dios a trave¿s de las manos en cuenco y me entrego a sus manos bondadosas. Aunque a veces tambie¿n vinculo los gestos con palabras que en ese momento emergen en mi¿.
Las oraciones que escribi¿ quizä te ayuden a expresar los pensamientos que estän en ti y para los cuales con frecuencia no encuentras palabras. Muchas personas me cuentan que no saben cömo rezar. Las oraciones oficiales les resultan ajenas. Las palabras propias les cuestan. Por esta razön, en las presentes oraciones quisiera procurarte palabras para que puedas expresarle a Dios lo que tü mismo sientes.
EDITORIAL BONUM ARGENTINA
Este libro contiene el siguiente programa de oraciones:Domingo Por la man¿ana: Participo en la calma de Dios
Por la noche: Me dejo caer en brazos bondadosos
Lunes Por la man¿ana: La fuente de Dios borbotea en mi¿
Por la noche: Extiendo mis manos hacia Dios
Martes Por la man¿ana: Grabo mi huella en el mundo
Por la noche: En mi¿ estä el espacio de silencio
Mie¿rcoles Por la man¿ana: Observo dönde vivo
Por la noche: El suen¿o serä bueno y sanador
Jueves Por la man¿ana: Envi¿o la bendiciön de Dios a este mundo
Por la noche: Vivo a partir del amor de Dios
Viernes Por la man¿ana: Abro el cielo sobre mi vida
Por la noche: Hago la sen¿al de la cruz
Säbado Por la man¿ana: Reconozco lo que Dios me obsequia
Por la noche: Soy tocado por Dios -
Para todos los di¿as por la man¿ana: Percibo el sabor de la vida
Por la noche: Desprenderse de todo El Padrenuestro En Dios encuentro mi verdadero ser
Con este libro conocerá más sobre la poderosa herramienta espiritual de la oración.
¡Adquiera ya este libro y conozca este hermoso tratado de comunicación divina!